El precio de la cosecha baja en origen y sube en destino

Año a año los productores agrícolas y ganaderos se quejan y organizan para exigir precios que permitan hacer sostenibles sus explotaciones, pues el precio en origen baja mientras sube en destino.

Una de las principales actividades complementarias a la agricultura y ganadería es la hostelería o turismo rural.
Turismo rural Casa Arana (Huesca)

La erosión del margen de explotación

Año a año los productores agrícolas y ganaderos se quejan y organizan para exigir precios que permitan hacer sostenibles sus explotaciones, pues el precio en origen baja mientras sube en destino.

La gran distribución marca los precios de venta presionando a la baja a los productores quienes sostienen que los precios a los que venden sus productos ya no son rentables. Por esta razón los productores orientan su negocio al volumen y a la subvención como única forma de hacer sostenible su actividad.

Desde el punto de vista del consumidor, esta situación tiene un efecto directo sobre la calidad: cada vez los productos son más homogéneos, "más industrializados" pero presentan menos sabor, llegando en algunos casos a ofrecer propiedades nutritivas por debajo de lo esperado debido a una recolección muy temprana y a los sistemas de conservación, que el productor se ve obligado a utilizar si no quiere perder dinero.

 

Otras formas de negocio como solución para agricultores y ganaderos
Una solución alternativa es complementar los ingresos con otras fórmulas de negocio relacionados con su entorno o actividad principal.

Hostelería y turismo rural
Una de las principales actividades complementarias en la agricultura y ganadería es la hostelería o turismo rural. En España existen muchas  explotaciones agropecuarias que regentan esta modalidad de negocio, consolidándose año a año como una opción para un público de turismo que busca combinar el destino de interior con un buen precio.

Comercialización directa al consumidor de productos agroalimentarios
Otra fórmula en auge es emprender la comercialización de los propios productos de forma de productor independiente o con régimen cooperativo directamente al consumidor.
La venta directa al consumidor habitualmente puede hacerse de dos manera o con ambas a la vez:

  • Apertura de puntos de venta propios en grandes poblaciones. Supone una gran inversión en locales y personal
     
  • Venta de productos en Internet (tienda online). Coste de entrada mucho más bajo pues solo precisa una buena página en internet con sistema de pago y destinar algunos recursos humanos (normalmente familiares si el volumen de venta no es muy grande)

Como la apertura de puntos de venta y distribución propios es costosa y requiere una formación específica y dedicación, la mayoria de agricultores y ganaderos han optado por la venta online como fuente adicional de ingresos. Hoy en día no es difícil encargar una web o darse de alta en un directorio especializado como Agroboca, que incluye nuestra propia web de forma gratuita y lista para empezar a vender. 

La venta directa al consumidor permite recuperar el margen comercial al reducir los eslabones de intermediación y ofrecer productos más frescos y de mayor calidad, pero a cambio exige un mínimo volumen de ventas para que la actividad pueda resultar rentable.

Existen muchos ejemplos de productores o cooperativas agrarias que han dado pasos en este sentido y desde la administración se impulsa esta iniciativa en forma de formación y subvenciones agrícolas para estimular en la agricultura el comercio de proximidad y el comercio electrónico.

Este sitio emplea cookies propias y de terceros para prestar sus servicios y para analizar el tráfico. Agroboca recibe información sobre tu uso de este sitio web. Si utilizas este sitio web, se sobreentiende que aceptas el uso de cookies.